La alimentación juega un papel fundamental en la salud de nuestra piel. Más allá de los cosméticos, lo que comemos influye directamente en la hidratación, elasticidad y luminosidad del rostro. ¿Quieres una piel más sana y radiante? Te contamos cuáles son los mejores alimentos para mejorar la piel desde el interior.

1. Alimentos ricos en antioxidantes: la clave contra el envejecimiento

Los antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro. Incorporar estos alimentos a tu dieta protegerá tu piel del daño celular y le dará un aspecto más joven.

  • Tomates: Ricos en licopeno, un potente antioxidante que protege la piel del daño solar.
  • Zanahorias: Su alto contenido en betacarotenos ayuda a mejorar el tono y la luminosidad de la piel.
  • Pimientos rojos: Fuente de vitamina C, esencial para la producción de colágeno.
  • Frutos rojos: Arándanos, fresas y frambuesas son aliados perfectos para una piel más firme y protegida.

2. Grasas saludables: esenciales para una piel hidratada

Las grasas saludables son fundamentales para mantener la elasticidad y prevenir la sequedad.

  • Aguacate: Rico en vitamina E y ácidos grasos esenciales, proporciona una piel hidratada y flexible.
  • Aceite de oliva virgen extra: Un básico en la dieta mediterránea con propiedades antiinflamatorias que favorecen la regeneración celular.
  • Frutos secos: Almendras, nueces y avellanas aportan omega-3 y vitamina E, esenciales para la piel.
  • Salmón y otros pescados grasos: Contienen ácidos grasos omega-3, que reducen la inflamación y mejoran la barrera cutánea.

3. Hidratación: el gran secreto de la piel luminosa

Beber suficiente agua es crucial para mantener una piel radiante. Además, algunos alimentos con alto contenido en agua ayudan a potenciar la hidratación:

  • Pepino y apio: Contribuyen a mantener la piel fresca y flexible.
  • Sandía y melón: Ricos en agua y antioxidantes, ideales para una piel hidratada.
  • Calabacín y espinacas: Llenos de agua y nutrientes esenciales.

4. Proteínas para una piel firme y regenerada

El colágeno es una de las proteínas más importantes para la piel. Consumir alimentos ricos en proteínas favorece su producción y ayuda a mantener la firmeza.

  • Legumbres: Lentejas y garbanzos aportan proteínas vegetales y minerales esenciales.
  • Huevos: Contienen aminoácidos esenciales para la regeneración celular.
  • Carne magra y pollo: Fuente de proteínas de alta calidad que fortalecen la piel.

5. Vitaminas y minerales imprescindibles para el cuidado de la piel

Las vitaminas A, C, D y E, junto con minerales como el zinc y el selenio, juegan un papel fundamental en la salud cutánea.

  • Verduras de hoja verde (espinacas, kale): Aportan hierro y vitaminas esenciales para la regeneración de la piel.
  • Cítricos (naranjas, kiwis, limones): Ricos en vitamina C, ayudan a la producción de colágeno.
  • Semillas de girasol y calabaza: Fuente de zinc y vitamina E, perfectos para combatir el acné y mejorar la elasticidad de la piel.

Una piel sana y luminosa no solo depende de los productos que aplicamos, sino también de los alimentos que consumimos. Una dieta equilibrada, rica en antioxidantes, grasas saludables, proteínas y vitaminas, es clave para mantener la piel hidratada, firme y protegida.

Consejo extra: complementa estos alimentos con un estilo de vida saludable, bebe agua suficiente, duerme bien y evita el estrés. ¡Tu piel lo agradecerá!

El verano es la época perfecta para disfrutar de salidas, ya sea a la playa, la montaña o un parque. ¡Pero ojo! Para poder aprovechar al máximo estos días, es esencial llevar contigo alimentos que te proporcionen la energía suficiente para hacer todos tus planes. Por eso, como nos gusta cuidarte, te contamos cuáles son los alimentos que no pueden faltarte en ninguna escapada y cómo mantenerlos en perfecto estado. ¡Presta atención!

Frutos secos

Los frutos secos, como las almendras, nueces y avellanas, son una excelente fuente de energía, proteínas y grasas saludables. Estos pequeños pero poderosos alimentos están llenos de antioxidantes, vitaminas E y B y minerales esenciales como el magnesio y el potasio.

Además, tienen la ventaja de mantenerte saciado por más tiempo, lo cual es ideal para evitar tentempiés poco saludables durante tu escapada.

Para conservar sus propiedades y frescura, te aconsejamos guardarlos en un recipiente hermético y mantenerlo en un lugar fresco y seco. Si tu escapada es larga o en un lugar muy caluroso, puedes llevarlos en una bolsa térmica para asegurarte de que se mantengan crujientes y deliciosos.

Empanadillas

Otra opción práctica y versátil para llevar en tus salidas son las empanadillas. Puedes rellenarlas con una gran variedad de ingredientes saludables como espinacas, queso, pollo, atún o verduras o el relleno para empanadas y empanadillas de Hida.

Este snack es una buena fuente de carbohidratos y proteínas, aportándote la energía necesaria para tus actividades al aire libre.

Para mantener las empanadillas frescas, es recomendable guardarlas en un recipiente hermético y, si es posible, en una nevera portátil. También te recomendamos envolverlas en papel de aluminio para conservar su temperatura y textura.

Fruta de temporada

El verano está repleto de frutas deliciosas y refrescantes que nos pueden acompañar en nuestras escapadas, como la sandía, el melón, las fresas y los melocotones.

Estas frutas están llenas de vitaminas y antioxidantes, lo que las convierte en la opción perfecta para mantenerte hidratado y fresco en los días calurosos de verano. Además, son bajas en calorías y muy fáciles de transportar.

Para conservarlas adecuadamente, lava y corta las frutas antes de salir, y guárdalas en recipientes herméticos en una nevera portátil. ¡Una idea! Puedes congelarlas antes de partirlas y comerlas heladas para disfrutar aún más del frescor.

Yogur

El yogur es una gran fuente de proteínas y probióticos, que son beneficiosos para la salud digestiva. Además, contiene calcio y vitaminas B, ideales para mantener tus niveles de energía y fortalecer tus huesos.

Para mantener el yogur fresco, llévalo en una nevera portátil o envasado en pequeñas porciones en recipientes herméticos. Si optas por yogur griego, su consistencia más espesa facilita su transporte y consumo en cualquier lugar.

Verduras crudas

Algunos vegetales como la zanahorias, los pimientos y los pepinos son perfectos para consumir crudos. Estos son ricos en vitaminas, fibra y antioxidantes, por lo que son snacks ligeros y refrescantes que te mantendrán hidratado y lleno de energía.

Lava y corta los vegetales en casa y guárdalos en recipientes herméticos. Para mantenerlos crujientes, es mejor llevarlos en una nevera portátil con paquetes de gel frío, asegurando que se mantengan en perfecto estado durante toda la escapada.

Barritas energéticas

Las barritas energéticas hechas con avena, frutos secos y miel son una opción rápida y nutritiva para mantener tus niveles de energía altos.

Estas barritas son fáciles de transportar y no requieren refrigeración, lo que las convierte en el snack ideal para cualquier tipo de salida.

Además, puedes hacerlas en casa con tus ingredientes favoritos, asegurándote de que sean saludables y deliciosas.

¡Ahora ya lo sabes! Elegir los alimentos adecuados para tus escapadas puede marcar una gran diferencia en tu experiencia. ¿Listo para tu próximo destino? Con estos alimentos, podrás disfrutar de un verano lleno de salud, energía y sabor.

Carbohidratos, grasas saludables, proteínas, vitaminas… todos hemos escuchado hablar de ellos y sabemos que son fundamentales para mantener una buena dieta y, concretamente, para el desarrollo de los más peques. Pero ¿dónde podemos encontrarlos? Como nos gusta cuidarte, en este blog hemos recopilado algunos de los alimentos indispensables para el crecimiento de los niños. ¡Toma nota! 

Lácteos 

Son esenciales para el desarrollo de los huesos ya que ayudan a su formación y fortalecimiento, lo que los convierte en un alimento clave en esta etapa. 

Aunque algunas de las principales fuentes de calcio y proteínas sean la leche, el yogur o el queso, también existen otras opciones para los que nos les gustan o son intolerantes a la lactosa. Por ejemplo, la leche de soja o de almendras son igual de nutritivas y deliciosas.

Además, también hay otras alternativas, que probablemente no esperabas, que también contienen calcio, como es el brócoli o algunas especias como el orégano y el eneldo secos.  

Frutas y verduras 

Unos de los productos más saludables son, sin duda, la fruta y verdura. ¿Y lo mejor? Su gran variedad permite absorber multitud de vitaminas y minerales esenciales para el crecimiento de los más pequeños. 

¡Y ojo! No tengas miedo de ofrecerles esta comida, pues es importante enseñarles desde bien pequeños a que es fundamental integrarla diariamente en la dieta para estar sanos. Por ello, sírveselas de manera atractiva y combinada con otros alimentos de su agrado.

Tomate, cebolla, pimiento, naranja… ¡son tantas las posibilidades que seguro que encuentras la que más les guste! 

Cereales 

Se trata de un alimento básico en su desarrollo ya que proporcionan la energía necesaria para su actividad diaria. Asimismo, cabe destacar que es mejor elegir los cereales integrales frente a los refinados, pues conservan la riqueza y el equilibrio del grano natural, además de sus proteínas, grasas, vitaminas, minerales y fibra. 

Son un rico cereal la avena, el arroz, el pan y la pasta integrales. Así que, ¡ya ves! Con solo tres alimentos, de los muchos cereales que existen, es posible preparar multitud de recetas saludables que seguro les encantarán. 

Pescado 

Para una alimentación completa es clave contar con el consumo de pescado blanco y azul en igual cantidad. Sin embargo, cabe destacar que el segundo posee un gran contenido en ácidos grasos Omega3 que estimulan el funcionamiento de las conexiones neuronales y, en consecuencia, se convierte en un producto básico para el crecimiento de los niños.  

Algunos de los pescados azules más atractivos y fáciles de consumir para los peques son el atún, el emperador o el salmón. Por lo tanto, te recomendamos incluirlos al menos dos veces por semana en su dieta. 

Frutos secos 

Los frutos secos destacan por ser una fuente de grasas saludables, proteínas y fibra y, por lo tanto, por proporcionar energía y propiedades antioxidantes al organismo. Algunas de las opciones más comunes que gustan a los peques son las almendras, las nueces o las semillas.  

¡Pero cuidado! Es importante prestar especial atención al ofrecerles este tipo de alimento pues, al tratarse de piezas pequeñas, podrían atragantarse. Por eso, te aconsejamos triturarlos o prepararlos en crema para que puedan disfrutar de ellos sin preocupaciones.  

Legumbres 

No cometas el error de delegarlas a un segundo plano en la alimentación infantil. Las legumbres son una excelente fuente de proteínas de origen vegetal y, por ello, ideales para la salud intestinal y su desarrollo durante la primera fase de crecimiento. Suelen destacar las lentejas, los garbanzos y los guisantes. 

Y recuerda consumirlas siempre teniendo en cuenta la edad del niño y proporcionándoselas de forma que las puedan ingerir sin atragantamientos y disfrutando al máximo de su sabor y beneficios. 

Como veis, son muchos los alimentos que potencian el crecimiento de los pequeños de la casa y les ayudan a desarrollarse fuertes y sanos. ¡Cuéntanos qué te parece y cómo haces tú para que les guste! 

Lo que comemos afecta al comportamiento de nuestro organismo. Del mismo modo en el que existen alimentos que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, a reducir el colesterol o que son diuréticas, también las hay que favorecen el bronceado. Sí, has leído bien, nuestra dieta también puede influir en ello… ¡pero ojo! Comerlos no te lo asegura, solo lo motiva. En este post te descubrimos algunos de los alimentos que “te ayudarán a ponerte moreno”. ¡Presta atención! 

Los pigmentos del bronceado 

La melanina y el betacaroteno son los pigmentos que definen la tonalidad de nuestra piel, pero es importante entender la función de cada uno.  

El primero es un pigmento producido por nuestras células que se activa con la exposición a los rayos UV y que se encarga de la coloración del pelo, ojos y dermis. Mientras que, el segundo es un pigmento natural, impulsor de la vitamina A, que se encuentra principalmente en frutas y verduras de color naranja, amarillo y rojo y vegetales de hojas verdes; y que ayuda a potenciar un aspecto más dorado y radiante a la piel.  

No obstante, es necesario remarcar que, aunque su consumo en ciertas cantidades puede incentivar esta tonalidad, esto no se logrará sin una correcta –y no excesiva- radiación al sol. A continuación, te descubrimos en qué alimentos es posible encontrarlo. 

Alimentos ricos en betacaroteno 

  • La zanahoria 

Uno de los alimentos más asociados con el moreno es, sin duda, la zanahoria. Y que, esta raíz aporta multitud de beneficios para nuestro organismo debido a su elevado contenido en agua, vitamina E y betacarotenos que se transforman en vitamina A, lo cual promueve el funcionamiento del sistema inmunológico, la buena visión y una piel sana. 

Puedes consumirla cruda en ensaladas, cocida en guisos o incluso convertirla en un original plato de espaguetis de zanahoria all´a amatriciana (puedes ver la receta paso a paso en nuestra web). 

  • El tomate 

Además de este pigmento, en el tomate es posible encontrar otros carotenoides como el licopeno, el cual es antioxidante y ambos ayudan a proteger a la dermis contra los radicales libres y los daños provocados por los rayos del sol.  

Una de sus grandes ventajas es que lo podemos incluir en multitud de recetas para todos los gustos. Además, el licopeno se absorbe mejor cuando se consume junto a grasas saludables como el aceite de oliva… ¡vamos que nuestro tomate frito es ideal! 

  • Pimiento rojo 

Este alimento es rico en antioxidantes como el betacaroteno y la quercetina, las cuales nos protegen de las células dañadas por los radicales libres y motivan una buena salud cardiovascular. Asimismo, al activar la vitamina A, actúa como la zanahoria, que ayuda a mantener una piel sana, una visión adecuada y el correcto funcionamiento del sistema inmunológico. 

¡Encuentra tu forma favorita de consumirlo y que no falte en tu dieta! 

  • Brócoli 

Esta verdura es un gran antiinflamatorio y su contenido en este pigmento vegetal ayudar a reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas, y también es un gran apoyo para el sistema inmunológico.  

¡Ahora ya lo sabes! Aunque recuerda, lo ideal es mantener una dieta variada y equilibrada rica en frutas y verduras de todo tipo, así como rica en grasas saludables que nos aporten los nutrientes esenciales para nuestra salud. 

 Y, por supuesto, hay que tener en cuenta que para obtener un bronceado natural será necesaria la exposición al sol y siempre aplicándonos protector solar para prevenir daños en la piel y evitar el riesgo de sufrir enfermedades cutáneas. ¡Este verano que tu moreno sea saludable y natural! 

paso-consumo-responsable-alimentos

El consumo responsable de los alimentos es algo que va más allá de la elección de qué comemos cada día, pues también incluye otras metas como intentar acortar la distancia entre lugar de producción y de consumo o apostar por productos de temporada.

Por ese motivo, desde el blog de conservas de vegetales de Hida Alimentación os vamos a hablar sobre qué pasos podemos seguir para hacer que nuestro consumo de alimentos sea más responsable.

Qué es el consumo responsable de alimentos

En realidad, no es más que prestar atención a lo que compramos, es decir, fijarnos en su procedencia, si son alimentos de temporada o no, qué empresa los fabrica o si su envase puede reciclarse, entre otras cosas. Al prestar atención a estas cosas lo que estamos haciendo es contribuir a mejorar el medio ambiente, ya que nos decantamos por opciones que ayudan bien a la economía local si compramos productos locales, o al medio ambiente si nuestra fruta y verdura es de temporada y reciclamos los envases de otros productos.

Pasos a dar para que nuestro consumo de alimentos sea responsable

El primer paso lo podemos dar desde casa sin hacer esfuerzo, y es llevar una dieta sana y equilibrada. Para ello es necesario que empecemos a consumir más cantidad de alimentos naturales, como el tomate natural, y dejar de lado los procesados y ultraprocesados.

El siguiente paso es cambiar nuestra forma de comprar alimentos. Para ello es mejor hacer un menú semanal o quincenal y sobre esa planificación hacer nuestra lista de la compra. De esta forma evitaremos comprar cosas que no vamos a utilizar y que luego se quedan al fondo de la nevera.  Por ejemplo, si hacemos una compra quincenal y queremos vegetales que no se echen a perder, podemos comprar conservas vegetales, que aguantan mejor el paso del tiempo.

Otro ejemplo de consumo responsable de alimentos son los productos ecológicos, como el tomate frito ecológico, ya que para producirlos no se han utilizado pesticidas u otras sustancias que tienen un impacto negativo en el medio ambiente.

Un paso que hacemos todos desde hace tiempo es reciclar los residuos que generamos. De esta forma se pueden tratar de forma correcta y reducimos nuestro impacto medioambiental.

Qué beneficios tiene practicar un consumo responsable de los alimentos

El primer beneficio que vamos a notar es el ahorro, ya que, si compramos solo lo que verdaderamente vamos a consumir, nuestro gasto en comida disminuirá. Además, al llevar una alimentación sana, nuestro cuerpo lo notará ya que le estaremos aportando los nutrientes que necesita.

El siguiente beneficio lo nota la economía local si apostamos por productos locales o de origen nacional. Estos productores verán como sus ventas aumentan y podrán seguir desarrollando su actividad. También estaremos acortando la distancia entre lugar de producción y de consumo, lo cual nos lleva a un ahorro energético y la reducción de emisiones nocivas para el medio ambiente.

Al final el principal beneficiado es el medio ambiente, ya que al ser conscientes de lo que consumimos y cómo lo consumimos estaremos ayudando a que mejore.  Y tú, ¿ya sabes cómo hacer un consumo responsable de los alimentos?

 

alimentos-para-tener-energia

Descansar lo suficiente, hacer deporte, desconectar de vez en cuando del trabajo, relajarnos… sabemos de sobra la receta para mantener nuestro ánimo y energía. Pero, cuando hablamos de alimentación, quizás no sabemos exactamente qué alimentos son los mejores para ayudarnos a reducir el estrés y recuperar la energía en nuestro día a día.

Por ello, desde el blog de conservas de vegetales de Hida Alimentación vamos a comentarte algunos alimentos con los que ganar vitalidad y combatir la debilidad de forma natural.

La incorporación de estos ingredientes en tu dieta no sólo te ayudará a aumentar tu energía, sino también a mejorar tu nivel de concentración y disminuir el estrés. Además, son muy nutritivos. Toma nota de estos súper alimentos:

Plátanos

Los plátanos son una de las frutas más consumidas, tanto por su sabor como por los beneficios que aporta. Son conocidos por ser una buena fuente de carbohidratos, vitamina B6 y otros nutrientes que aumentan los niveles de energía en nuestro organismo.

Pero, ¿qué tiene el plátano para que nos de esa energía inmediata? Altas cantidades de potasio. Además, el potasio evita sobre todo los calambres y algunas lesiones musculares, de ahí que se consuma tanto entre deportistas con grandes requerimientos físicos para mejorar el rendimiento. También, nos ayuda a regular nuestro sistema nervioso.

Si a estos beneficios, le sumamos su sabor, y la versatilidad que tiene como ingrediente en infinidad de platos, ¡es un alimento top!

Quinoa y legumbres

Si no la habéis probado aún, puede que sea el momento. La quinoa tiene un sabor muy parecido al arroz o al cuscús. Estas pequeñas semillas han enamorado a quienes buscan seguir una alimentación natural y ecológica. Además, es perfecto para combinar con alimentos de sabores más intensos. Quinoa con verduras, quinoa con tomate frito, salteados de quinoa… tiene muchas posibilidades.

Su éxito no es de extrañar debido al gran aporte de energía y fibra que contiene, muy similar al de los cereales integrales. Si eres de los que sigue una dieta vegetal, la quinoa cuenta con proteínas vegetales muy completas y con gran cantidad de minerales.

Las cantidades que contiene de folato, magnesio, fósforo y manganeso, llevan hidratos de carbono ricos en fibra, por lo que aseguran unos niveles de energía que se mantendrán durante todo el día.

Además, tiene infinitas formas de combinarlo con cualquier verdura o legumbre.

¿Y lo mejor? es bajo en calorías.

Huevos

El huevo es uno de los alimentos más recomendados para una dieta sana y saludable. Se trata de una proteína de calidad, ya que aporta todos los aminoácidos esenciales, entre ellos, los precursores de la serotonina, que están relacionados con el estado de ánimo. La opción de tomarlo cocido, o en tortilla, o pasado por agua en el desayuno, puede aportarte los nutrientes necesarios para ponerte en modo ON durante todo el día.

El huevo contiene proteínas, grasas saludables, vitaminas, minerales y antioxidantes, por lo que es altamente nutritivo para formar parte de nuestra dieta habitual. Además, no solo ayudan a mantenernos con más energía, sino que son saciantes.

Si no te gusta cocinar mucho, los huevos resultan muy fáciles de preparar, consumir y combinar con cualquier tipo de alimento. Y para los más deportistas, qué decir tiene, puedes combinarlos con cualquier verdura, arroz o incluso con tomate frito, para coger la energía y fuerza necesaria para tu entrenamiento.

Verduras

Para mantenernos con energía en nuestro día a día es esencial contar en nuestra dieta con alimentos que nos aporten los nutrientes esenciales, entre ellos están las verduras de hoja verde. Y sin duda la verdura estrella asociada a la energía y la fuerza, son las espinacas.

¿Os acordáis lo que le pasaba a Popeye cuando las comía? Pues Popeye eligió muy bien su fuente de energía. Y es que las espinacas, además de ser muy energéticas, contienen carotenoides y betacarotenos, antioxidantes, vitamina K y son ricas en hierro y calcio. La cantidad de proteína que tienen son fácilmente digeridas por nuestro organismo, por lo que sus nutrientes aportan energía con facilidad.

Frutos secos

Son una combinación ideal de grasas saludables, fibra, proteína vegetal e hidratos de carbono. Además, son la opción perfecta para empezar el día, puesto que son energéticos y pueden combinarse con lácteos como el yogur o con cualquier fruta.

Las almendras, anacardos y las nueces son ricas en proteínas, carbohidratos y grasas saludables que ayudan a liberar lentamente nuestra energía durante el día.

Pero no te pases, que son ricos en calorías.

Pues ya conocéis algunos de los alimentos que más energía nos aportan. Esperamos haber ayudado a que vuestros días estén llenos de vitalidad y buen humor. ¿Os animáis a incluirlos en vuestros platos?¿O ya se encuentran en vuestra dieta?

Trucos-y-consejos-para-descongelar-alimentos

A todos nos gusta que la comida que devoramos con tanta pasión sea saludable, además de saciarnos el apetito. También nos gusta ahorrarnos tiempo en la cocina para poder disfrutar de más tiempo libre y por eso acudimos a las conservas vegetales, que son sanas y nos permiten dosificar el tiempo en la cocina.

Pero ¿qué ocurre con los productos descongelados? Como sabes, es una manera fácil de ahorrar y mantener el consumo de alimentos una vez adquiridos. Sin embargo, las prisas y la cocina no son grandes aliadas. No vale saltarse pasos a la tolera por una simple cuestión de comodidad.

Los motivos son evidentes: descongelar los alimentos de manera correcta es fundamental para que sigan manteniendo sus propiedades y evitar así posibles intoxicaciones alimentarias. Y no sólo ese, hay que tener en cuenta que si el alimento todavía está congelado ¡más tiempo se necesitará para descongelarlo y cocinar!

Por eso, como lo sabemos y nos encanta cuidarte, desde el blog de conservas vegetales de Hida Alimentación te contamos una serie de trucos para descongelar alimentos correctamente. ¡Sigue leyendo!

Descongelar en un frigorífico o nevera

Lo primero que tienes que hacer al meter un alimento en la nevera es comprobar la temperatura que hay en el interior, además del tamaño de este. Como norma general, lo ideal es descongelarlos entre 4 y 5 grados durante al menos 1 día para que lo haga despacio y no de manera apresurada.  Si lo hacemos a menor temperatura el producto tardará más tiempo en descongelarse.

Otras de las cosas que debemos tener en consideración es el tipo de alimento. ¡No todos los productos son lo mismo! Por ejemplo, el marisco y la carne picada pueden consumirse hasta uno o días después de descongelarse. Truco: utiliza un plato para evitar que pueda gotear y colócalos en la estantería más baja del frigorífico.

Descongelar al cocinar

Las comidas y alimentos también se pueden descongelar como parte del proceso de la elaboración de platos y recetas. Simplemente hay que cocinarlos sin previa descongelación, revisando la temperatura para asegurar que se haga completamente.

¡Importante! Este tip no puedes emplearlo con todos los comestibles. Verduras congeladas o carnes molidas son algunos de los alimentos que podemos emplear con este truco.

Descongelar en agua fría

Este es un método bastante rápido. Debemos asegurarnos de que el producto este envasado de forma hermética para que no permita fugas, de manera que no absorba agua y pierda calidad. Se debe introducir en agua fría y no caliente, y esta debe cambiarse alrededor de media hora para que continúe la descongelación y no se temple.

Este método debe hacerse entre dos y tres horas dependiendo del tamaño del alimento. Para ello, hay que pensar que los paquetes de un kilo o inferior se pueden descongelar en una hora, pero para cantidades más grandes se necesitará más tiempo.

Descongelar en el microondas

Por último, también podemos emplear el microondas, pero únicamente si los vamos a cocinar inmediatamente. La máxima precaución que hay que llevar a cabo aquí es cortar los alimentos en trozos pequeños para que la descongelación sea uniforme, evitando que lo hagan únicamente los extremos y no el centro. ¡Ojo! No descongeles un alimento que previamente lo hayas hecho ya por el microondas.

Y estos son las cuatro maneras que te proponemos para descongelar alimentos. Y tú, ¿cuál sueles utilizar más a menudo?