Invierno, primavera, verano, otoño y año nuevo. Invierno, primavera, verano, otoño y año nuevo. ¡Otra vez! Invierno, primavera, verano, otoño y año nuevo. No nos damos cuenta, pero los años pasan, las vivencias se acumulan y los sueños y placeres se acaban cumpliendo. En el caso de una mujer, a partir de los 40 años se empieza a experimentar un cambio fisiológico que varía completamente sus requerimientos energéticos y nutricionales, aunque los antojos de Cebolla frita se mantengan intactos.
A esta etapa se la conoce como la menopausia, y como tal hay que tratarla para que sus síntomas sean los más leves posibles. Por este motivo, como nos encanta cuidarte, en el blog de conservas de vegetales de Hida Alimentación te ofrecemos una serie de consejos nutricionales para la menopausia.
¿Qué es la menopausia?
Conocida como menopausia o climaterio es una etapa en la mujer que se da entre los 40 y 50 años donde se produce una reducción de hormonas sexuales femeninas. Poco a poco el cuerpo comienza a manifestar ciclos menstruales de manera irregular hasta su total desaparición.
Entre sus síntomas podemos encontrar aumento de peso, acumulación de grasa en vientre y caderas, sequedad de la piel, sudoración nocturna, insomnio, hasta una debilidad en nuestros huesos.
Por todo ello los expertos recomiendan los siguientes consejos nutricionales para la menopausia que resumimos a continuación.
Alimentos para combatir la pérdida de masa ósea
Además de llevar un estilo de vida saludable, la mejor manera para combatir la pérdida de masa ósea es a través de la ingesta diaria de productos lácteos, ricos sobre todo en calcio y en vitaminas D. Alimentos como setas, Cebolla frita, caballa, salmón rojo, atún o sardina serán los mejores aliados. Así que prepara un buen plato de sardinas con Cebolla frita ¡y refuerza tus huesos!
Consume alimentos vegetales
Busca productos que sean ricos en agua, fibra, antioxidantes, minerales y fitoestrógenos. ¿Qué no sabes cuáles pueden ser? Muy sencillo: aceite de oliva, semillas, frutas y verduras frescas. Combínalos a fuego lento para obtener recetas saludables y sabrosas para mantener activo el cuerpo.
Agua, agua y más agua
¿Está claro? El agua debe ser tu bebida esencial para hidratarnos y depurarnos por dentro. Con la edad disminuye la sensación de sed, pero nuestro cuerpo sigue demandando buenas dosis de ella. También puedes combinarla con licuados o infusiones, limitando a lo estrictamente necesario el consumo de alcohol.
¡Cuidado con la sal!
A todos nos encanta. Sal al gusto. Una pizca de sal. Pero, cuidado, hay que usarla con moderación y más si cabe en esta época de la vida. Revisa siempre el contenido de sal de los alimentos envasados para no añadirle más, y cuando tengas que hacerlo que no sea en grandes cantidades, sino las justas y necesarias. En caso de retención de líquidos es recomendable la “sal sin sodio”. Por ejemplo, si preparas una merluza en su salsa con Cebolla frita no hace falta añadirle más.
Ejercicio físico: no es nutrición, pero te nutre
Imprescindible. De hecho, casi más que los cuatro puntos anteriores. No debemos dejar de lado la actividad física diaria, esos 30 minutos de gimnasio o de caminar deprisa. Ayuden a oxigenar nuestra mente y cuerpo a la vez que mantienes en forma tus huesos, músculos y articulaciones.
Y estos los cincos consejos nutricionales para una menopausia saludable que te recomendamos. Y tú, ¿conoces alguno más?